
A primeras horas del 25 de octubre de 2020, la compañía Coreana confirmó la noticia del lamentable descenso de su director Lee Kun-hee a los 78 años. El alto ejecutivo fue responsable de convertir a Samsung Electronics en el gigante tecnológico que conocemos hoy en día.
Lee Kun-hee asumió el cargo en 1987, tras la muerte de su padre, con un objetivo claro en mente darle un completo rediseño a la compañía que los distingue por completo de una empresa fabricante de televisores y hornos de microondas baratos hacia una marca de alto nivel, en el que «La calidad fuera el orgullo de Lee».
Esta filosofía llevó a Samsung a superarse, en los 90s consiguió sobrepasar a fabricantes japoneses y americanos en el desarrollo de chips de memoria. Posteriormente impulsó el mercado de televisiones planas y a principios de los 2000 se convirtió en un referente en el mercado móvil, desde la gama media hasta la premium de smartphones, como lo conocemos actualmente.

Lee Kun-hee llegó a convertirse en el hombre más rico de Corea del Sur. Sin embargo, no logró mantenerse exento de problemas legales, acusado de delitos de cuello blanco: soborno al presidente de Corea del Sur en 1995, y evasión de impuestos y malversación de fondos en 2008. Sin embargo, en ambas ocasiones fue formalmente perdonado.
Por el momento no se ha dado más información respecto acerca de la causa de fallecimiento del señor Kun, lo único que se sabe es que en 2014 sufrió de un ataque en el corazón que lo dejó fuera de la vida pública, momento en el que tomó control de la compañía su hijo Lee Jae-yong, actual vicepresidente de Samsung, quien se cree que asumirá el cargo formalmente en próximas semanas.
Fuente | Xataka